De pequeña
solía pensar que todo tenia arreglo y que se solucionaba con un simple
"PERDON" pero vas creciendo y te das cuenta que las cosas no
funcionan así, que si haces daño la vida tarde o temprano te lo devuelve,
aprendí que pidiendo disculpas no sanas el daño que has hecho, que quizás las
palabras que salen de nuestra boca no lo hacen con la intención de hacer sentir
mal a la otra persona pero nunca sabemos la situación en la que se encuentra y
el grado de daño que le haces, desde críos nos animan a pedir perdón, pero ¿en
realidad esa palabra tiene todo el valor que le damos? en mi opinión esta muy
sobrevalorada, puede que nos reconforte algo, pero eso no sana la herida que
has hecho, la única solución es esperar a que transcurra el tiempo y ahí es
cuando poco a poco las heridas van sanando.